El pleno del Ayuntamiento de Lleida aprobará a través de una moción, este viernes, la prohibición de entrar en cualquier equipamiento público municipal con burka o niqab.
El alcalde de Lleida, el socialista Ángel Ros, ha explicado hoy que “los ayuntamientos pueden regular los criterios para entrar y permanecer en los equipamientos públicos” y ha añadido que la medida regularía el uso del burka en “pabellones, centros cívicos, educativos o culturales”.
Según Ros, “los valores como la igualdad de género y el respeto a la mujer son irrenunciables”. Sobre la prohibición de llevar burka en la misma calle, el alcalde de Lleida ha remarcado que son “el Estado y la Generalitat los que deben abrir un debate y desarrollar una norma en este sentido”.
Por su parte, la comunidad islámica de Lleida, que representa a los musulmanes de 16 mezquitas de Ponent i Alt Pirineu y Aran, ha anunciado que si se lleva adelante la prohibición del burka en espacios municipales, presentarán un recurso de inconstitucionalidad en el Tribunal Constitucional (TC). Así lo ha asegurado a la ACN el portavoz de esta comunidad, Abdul Karim, quien ha calificado la medida como “partidista” y se ha mostrado convencido de que impulsará el rechazo ciudadano a los ciudadanos musulmanes.
Para Karim, la prohibición es “inconstitucional” porque “limita la libertad que prevé la Constitución“.